La osteopátia pediátrica hace un abordaje muy respetuoso hacia el bebé, utilizando técnicas muy suaves desde el primer momento de vida y durante el crecimiento de los pequeños. 

Un mal embarazo, un parto difícil, instrumenalizado con ventosas o fórceps puede provocar alteraciones en el desarrollo psicomotor del bebé.

Todas estas circunstancias pueden quedar marcadas en el cuerpo del niño y se expresan como tensiones, zonas poco móviles con cambios circulatorios, hormonales que con el paso del tiempo pueden provocar otras dolencias como alteraciones del sistema digestivo como los frecuentes cólicos, reflujos o estreñimiento; problemas del sueño y deformidades craneales como las plagiocefalias, etc…

La osteopatía pediátrica acompaña al niño en su crecimiento ayudándole a tratar problemas de columna, malas posiciones de los pies, problemas oclusivos, infecciones respiratorias, etc.. Permitiendo desde un abordaje general del niño mejorar su estado de salud.

Servicio de osteopatía a menores de 0 a 14 años.