Desde un abordaje general del paciente ayudamos al organismo a que consiga adaptarse al entorno en el que vive.

 El osteópata busca la salud.

 Como terapeutas a través de nuestras manos intentamos tratar los obstáculos o barreras que pueden interferir en la salud del paciente.

Partiendo de una exploración intentamos detectar disfunciones para después hacer las correcciones necesarias  y así, mejorar la movilidad de las estructuras y permitir la circulación de todos los fluidos (sangre, linfa, etc…)

Porque la recuperación del ritmo de los fluidos y del funcionamiento correcto de la fisiología de los diferentes sistemas pone en marcha los recursos para la capacidad de autocuración de la persona.